Crece la presión en el PJ: llaman a Cristina Kirchner y Kicillof a negociar la estrategia electoral

Dirigentes peronistas impulsan un encuentro entre la ex presidenta, el gobernador bonaerense y Sergio Massa para evitar la fragmentación de cara a las elecciones de 2025. Las divisiones internas amenazan la unidad de la coalición.

La necesidad de unificar al peronismo bonaerense ha puesto en el centro de las discusiones una posible reunión entre Cristina Fernández de Kirchner y Axel Kicillof, mediada por Sergio Massa. La relación entre la ex presidenta y el gobernador es tensa, marcada por diferencias estratégicas y políticas que dificultan la articulación interna de la alianza.

Dirigentes cercanos a ambos sectores consideran clave crear una mesa tripartita para delinear la estrategia electoral en la provincia de Buenos Aires. Esta instancia buscaría definir temas cruciales como la eliminación de las PASO, el desdoblamiento de elecciones provinciales y el uso de boleta única de papel. Sin embargo, las tensiones internas persisten: el sector liderado por La Cámpora mantiene frialdad con Kicillof, quien, a su vez, reclama autonomía en sus decisiones políticas.

Aunque Massa ha sido señalado como un posible intermediario, el líder del Frente Renovador descarta involucrarse directamente. Delegados de las tres partes, como Carlos Bianco y Agustina Vila por Kicillof, Teresa García por CFK, y Sebastián Galmarini por Massa, han mantenido conversaciones preliminares.

El consenso dentro del PJ bonaerense no es unánime. Algunos dirigentes sugieren que dividir la oferta electoral en dos listas podría ser beneficioso, mientras otros insisten en que solo una coalición unificada puede enfrentar con éxito a candidatos de la oposición, como Javier Milei.

“La única forma de que Cristina entienda la necesidad de unidad es con un acuerdo sólido”, expresó un dirigente peronista. La posibilidad de una lista paralela también emerge como un escenario plausible para dirimir liderazgos internos.

El tiempo apremia, y en La Plata reconocen que cualquier decisión debe tomarse con suficiente anticipación para evitar fracturas irreparables en la coalición.