Investigan torturas en una cárcel: encontraron a un preso muerto con golpes y atado a una cama
La Justicia ordenó la detención del director del penal de Bouwer, seis guardias y un médico forense por presunta tortura seguida de muerte. La víctima, de 50 años, no tenía antecedentes penales y lo habían arrestado por una infracción menor.
Ocho funcionarios públicos de la cárcel de Bouwer fueron detenidos en las últimas horas en medio de un escándalo de violencia institucional. Se trata de un exdirector del penal, seis guardias y un médico forense, todos ellos acusados de torturar y matar a un preso en septiembre del año pasado.
La víctima, César Darío Moreno, había sido detenido por una infracción menor y no tenía antecedentes penales. En un principio estuvo alojado en el Establecimiento Penitenciario 9 de Córdoba, pero después lo trasladaron a Bouwer por falta de espacio.
Según la acusación, Moreno sufrió una salvaje paliza por parte de un grupo de guardias, pero no fueron esos golpes los que causaron su muerte. Después, el detenido fue atado de pies y manos en una cama y lo mantuvieron así, inmovilizado, aislado y sin recibir atención médica, durante 48 horas, hasta que se descompensó y murió el 18 de septiembre pasado.
Una fuente cercana a la causa detalló a La Voz del Interior que cuentan con filmaciones, pruebas testimoniales, técnico científica, análisis interdisciplinarios por parte de la Dirección General de Policía Judicial y del Instituto de Medicina Forense que “permiten sostener, en esta altura del proceso, la existencia del hecho y la participación de los ahora imputados”.
Así, después de seis meses de investigación, el fiscal José Mana ordenó las detenciones en el marco de una serie de 10 allanamientos en distintos puntos de la ciudad y los imputó a los ocho funcionarios por el delito de tortura seguida de muerte, que prevé la pena de prisión perpetua.
Además, indicaron, hay un noveno efectivo penitenciario involucrado en el hecho que no pudo ser ubicado hasta el momento, pero que se espera que comparezca a la sede de la Fiscalía en las próximas horas.
Este no es el primer escándalo que salpica al Servicio Penitenciario de Córdoba. En diciembre pasado Juan María Bouvier, quien durante 15 años había sido el hombre fuerte de toda la estructura carcelaria local, fue detenido acusado de liderar una presunta asociación para generar todo tipo de ilícitos en el interior de las cárceles de la provincia.